Existen diversas maneras de determinar si has ovulado y conocer el momento de la ovulación. Pero en este artículo nos centraremos sobre todo en aquellas que puedes llevar a cabo tú misma.
Normalmente nos interesamos en conocer todo esto, cuando estamos buscando un embarazo y éste no llega, o si los ciclos son muy irregulares. Si lo piensas bien, lo suyo sería que ya de pequeñas, con nuestra primera menstruación, nos enseñarán a detectar cuando ovulamos.
Así, podríamos saber antes que nadie, si hay algún desajuste en nuestro ciclo menstrual, si es necesario consultar a algún especialista, o simplemente conocernos mejor en el caso de querer quedarnos embarazadas o no.
¿Verdad que la cosa cambiaría radicalmente?
Pero más vale tarde que nunca, así que, ahí van 5 marcadores (más alguno que otro extra) para reconocer cuándo ovulamos.
Te proponemos:
Índice
Artículo locutado
¿Cómo saber cuándo ovulo? Registro presonalizado
Es el sistema “más sencillo” de los que disponemos, ya que depende solamente de ti. Lo ponemos entre comillas porque va a requerir de mucha constancia los primeros meses. Luego como todo, cuanto más te conoces, más fácil es.
Este registro se basa en anotar todos los biomarcadores que comentaremos a continuación, del primer día de sangrado menstrual, al primer día de sangrado del ciclo siguiente. Es importante que lo anotes en alguna gráfica, diagrama menstrual o calendario y lo realices a lo largo de varios meses.
En nuestro Programa Premium de Ciclicidad FemeninaI tienes un apartado de autodescubrimiento y aprendizaje de cómo registrar tu información en el diagrama menstrual. Si quieres saber más sólo tienes que entrar AQUÍ e informarte.
Biomarcadores para conocer cuando estamos en la fase ovulatoria y si hemos tenido el pico ovulatorio:
- Marcadores del método sintotérmico:
- Flujo del moco cervical
- Sensación vulvar
- Temperatura basal
- Palpación del cuello uterino
- Test de ovulación
¿Por qué es interesante que registres esta información?
Porque la fase ovulatoria es la fase donde se van a producir los fenómenos esenciales para que puedas tener un ciclo menstrual y/o un ciclo reproductivo fisiológico.
Es decir, gracias al desprendimiento del ovocito hacia las trompas y al deterioro del folículo que contenía al ovocito (lo que conocemos como cuerpo lúteo), podrás tener la menstruación y/o poder gestar un bebé, si así lo deseas.
Los ciclos entre 25 y 35 días son generalmente ovulatorios.
Si los ciclos son más cortos puede ser por el acortamiento de la primera fase del ciclo, la fase folicular. Esto es frecuente que se produzca con la edad. También puede que el ciclo corto sea consecuencia de una fase lútea más corta, con un endometrio más fino y menos preparado para concebir.
Se calcula que el día de ovulación es el día 14 antes del inicio del sangrado. Al menos así es como lo calculan las aplicaciones móviles. Pero si estás buscando un embarazo, es importante que hagas un buen registro de tus ciclos, porque estos 14 días antes es en general, pero en tu caso concreto puede variar ligeramente y puede que estés teniendo relaciones sexuales, por ejemplo, un día antes de que se dé el pico ovulatorio.
Hablemos un poco más de los biomarcadores comentados
Marcadores del Método Sintotérmico
Cambios en el flujo del moco cervical
Vas a registrar este moco en función de su filancia (elasticidad):
- Sin moco
- Grumoso
- Elástico
- Cremoso.
Justo después de cesar el sangrado menstrual, es probable que no notes flujo porque los niveles de estrógenos todavía son bajos. A medida que se incrementa el nivel de estradiol, la hormona de la primera fase del ciclo o fase folicular, también se incrementa la cantidad y la consistencia del moco cervical. Es fácil que puedas detectar este cambio. Al principio puede ser espeso volviéndose luego más grumoso, de color nublado o incluso algo amarillento.
A medida que se acerca la ovulación, se produce mucho más flujo cervical, siendo más elástico, cremoso y claro (parecido al día o días post ovulación), hasta llegar a la consistencia de “clara de huevo” tan característica alrededor de la ovulación.
A pesar de que la cantidad de flujo es muy personal, en el momento del pico ovulatorio, percibirás que es mucho mayor que en otros momentos del ciclo.
Tras la ovulación, el flujo se vuelve más pegajoso, llegando a no haber moco los días previos a la menstruación.
Los cambios en el fluido cervical pueden detectar alteraciones hormonales pero también infecciones. Cambios bruscos y persistentes en el color (gris, verde, amarillento) o en la consistencia (grumosa, gruesa) así como en el volumen (incremento brusco de la cantidad) y o en el olor, pueden ser indicación de consulta médica.
Ejemplo de registro del flujo del moco cervical
Cambios en la sensación vulvar
Vas a registrar esta sensación vulvar como
- Sequedad
- Humedad: sientes la vulva húmeda, pero no llega a mojar la ropa interior.
- Mojada: cuando sientes que la ropa interior se moja
- Lubricada: cuando sientes que por mucho que te limpies la vulva tras orinar, es como si nunca se secara, como si el papel resbalara.
El día de PICO OVULATORIO en el registro será el último día de mayor flujo elástico (clara de huevo), que coincida con el día de mayor sensación de lubricación a nivel vulvar (no el de mayor cantidad). Esto te lo acabará de confirmar la temperatura corporal.
Estas dos variables, el flujo y la sensación vulvar, será interesante que las observes:
- Antes y después de la micción con el papel doblado y liso (sin arrugas).
- Pasando el papel por tu zona vulvar (no vaginal) de delante hacia atrás.
- Prestando atención en cómo desliza el papel.
- Valorarlo a lo largo del día y registrar toda la información por la noche.
- Marcarás siempre el día más fértil. Cuando el flujo del moco cervical sea elástico (tipo clara de huevo) y cuando la sensación vulvar sea de estar muy lubricada.
El día pico será el día en el que más probablemente ovules (+/- 24h). El tema es que para saber esto, necesitas registrar varios meses, ya que se sabe con una visión retrospectiva.
Ejemplo de registro de la sensación vulvar
Temperatura basal
La progesterona, que predomina en la fase lútea, produce elevación de la temperatura corporal. Por eso debes tomarte la temperatura a diario, preferiblemente bajo la lengua, por la mañana a la misma hora y antes de realizar cualquier otra actividad como ducharte, desayunar o incluso hablar.
Necesitarás un termómetro digital de 2 decimales o de galio para poder detectar estas variaciones de tan sólo décimas, y lo anotarás redondeando la segunda cifra.
Si por algún motivo te despiertas más temprano, si es una hora antes, le sumarás 0,1º a tu resultado, pero tanto si te despiertas dos horas o más antes, le sumarás como máximo 0,2º al resultado.
Por el contrario, si te levantas más tarde, si es una hora después de lo normal, le restarás 0,1º al resultado, pero si te despiertas dos horas o más tarde, como mucho le restarás 0,2º al resultado.
Y si consideras que la toma no es fiable, no la anotarás en la gráfica
En un ciclo menstrual normal, la temperatura incrementa uno o dos días tras el pico de LH y persiste 10 días. Por tanto, te será útil para saber si has ovulado con posterioridad pero no te servirá como test de ovulación para dirigir tus relaciones sexuales.
Registrar la curva de la temperatura sirve para:
- Confirmar que ya has ovulado.
- Valorar la calidad del cuerpo lúteo y los niveles de progesterona.
- Sospechar de un embarazo.
- Identificar el final de la ventana fértil.
El descenso de la temperatura al final de la fase lútea indica la llegada de la menstruación.
Estos tres biomarcadores: moco cervical, sensación vulvar y temperatura basal corporal forman parte del Método sintotérmico.
El método sintotérmico es una forma estandarizada de registrar la información antes comentada para que te aporten información confiable para extraer datos de salud y fertilidad.
No te vamos a engañar, se necesita ser muy constante y metódica, pero es un buen sistema como búsqueda de embarazo (si no hay patología menstrual), como método de autoconocimiento, al igual, que si lo quieres usar para evitar un embarazo. En este último caso especialmente, lo mejor es que te dejes acompañar por alguna persona certificada del método.
Otros biomarcadores opcionales que puedes incluir en tu registro personalizado son:
Palpación del cuello uterino
A lo largo del ciclo menstrual, tu útero va moviéndose. Este no es un biomarcador del método sintotérmico, pero es interesante para que puedas sentir cómo cambia todo tu cuerpo por dentro, y de la importancia de que los órganos estén móviles y oxigenados.
El cuello uterino (también conocido como cérvix) lo puedes tocar con tus dedos y lo puedes localizar al fondo de la vagina. Es importante que tus manos estén limpias y las uñas bien cortas y limadas para no hacerte daño.
Te recomendamos que te coloques en posición de cuclillas, para que sea lo más simétrico posible y cuando te sientas bien relajada, introduzcas poco a poco el dedo o dedos en tu vagina. Si lo necesitas, ayúdate de algún lubricante de base acuosa. No necesitas guantes, es tu vagina.
El cuello del útero, durante la menstruación y la ovulación estará alto (te será más difícil palparlo porque estará más profundo), centrado y mirando hacia la salida vaginal, con el orificio que conecta con el interior del útero abierto y todo él más blandito y húmedo.
En cambio, fuera de estos dos momentos, a lo largo de la fase folicular y durante la fase lútea, el útero cierra las compuertas creando un moco muy espeso para que nada pueda acceder, se pone más duro, se esconde hacia posterior (dirección al recto), y desciende ligeramente.
Ésta imagen es de FEM ANCESTRAL
No sé a ti, pero a nosotras estos movimientos del útero nos parecen magníficos. Cómo se abre a recibir y dar cuando es necesario, y cómo se protege y aísla cuando debe.
A continuación puedes ver un ejemplo de cómo podría ser tu registro. A nivel gráfico, puede ser cómo a ti te vaya mejor, lo importante es registrar toda la información que hemos comentado.
Descárgate este registro de manera gratuita al final de este artículo
Test de ovulación
También están disponibles en la farmacia unos tests que detectan el pico de LH en orina, que precede la ovulación y que suele durar 2-3 días. Son tests muy fiables pero es importante que tengas previamente una idea de cuándo realizarlos, según el día que calcules que pudieras estar ovulando, para tener mayor posibilidad de acierto y evitar repetir el test muchas veces.
Otros
Existen otras maneras de determinar si estás ovulando o a punto de hacerlo. Pero para éstas que te contamos a continuación ya vas a necesitar la ayuda de un profesional:
- Determinación hormonal de progesterona, estradiol y LH en sangre, mediante un análisis.
- Control ecográfico, del crecimiento folicular, grosor endometrial.
Deseamos que toda esta información te haya servido. Es una forma magnífica de volver a conectar con nuestro cuerpo femenino, recuperar el conocimiento que un día perdimos sobre nuestra propia gestión hormonal y recuperar las riendas de nuestra fertilidad.
Como comentábamos antes, información como ésta y mucha parte práctica para que lo lleves al cuerpo y a tu día a día, la vas a encontrar en nuestro programa de CICLICIDAD FEMENINA. ¿A qué esperas para coger las riendas de tu cuerpo?
Descárgate este registro
¿Quieres descargarte nuestro registro, dónde podrás anotar todas las variables de las que te hemos hablado?